El tribunal supremo ha venido delimitando cada grado de incapacidad, estableciendo que ha de reconocerse la incapacidad permanente absoluta, no solo al trabajador que carece de actitud física sino también al trabajador que, manteniendo las posibilidades de ejecución de ciertas tareas, no tenga facultades para desarrollarlas de manera eficaz.
Solicitar una incapacidad como consecuencia de una hernia discal
Para solicitar una incapacidad como consecuencia de una hernia discal debemos tener la documentación médica que acredite no solo que tenemos una hernia, si no también si tenemos una afección neurológica, ya que en este caso es más fácil conseguir una incapacidad mayor.
Para saber qué grado de incapacidad podemos solicitar tenemos que valorar las actividades que desarrollamos en nuestra trabajo, y ver las actividades que no nos permite realizar la hernia que tenemos, es decir que puede haber actividades que podamos realizar y otras que no nos sea imposible.
Para llevar a cabo la reclamación en este tipo de casos es recomendable tener un informe de perito medico experto en la valoración de riesgos laborales. Ya que puede redactar un informe que indique la actividad que desarrolla el trabajador y cuáles pueden ser las limitaciones que tenga el trabajador.
Por otro lado también es necesario tener un informe de un perito médico experto en la valoración del daño corporal, para poder acreditar las limitaciones que tiene el trabajador como consecuencia de le hernia, es decir saber a qué movimientos le afectan.
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