El Hospital Virgen de la Victoria, así como todos sus centros dependientes, está llevando a cabo mejoras relacionadas con las condiciones de seguridad de los usuarios. Para ello, y coordinado por el área de Servicios Generales y Confortabilidad, se han reforzado con personal adicional de seguridad, celadores y administrativos los puntos de acceso para controlar y regular las entradas y tránsito de usuarios y profesionales.
Esta medida forma parte del plan para mejorar la seguridad de todo el complejo hospitalario, que incluye el control de accesos en la puerta principal, puerta de urgencias y patio azul de consultas externas del Clínico, acceso a consultas del Hospital Marítimo de Torremolinos, accesos al Centro de Especialidades San José Obrero y del Hospital Valle del Guadalhorce.
Asimismo, y desde el día 1 de octubre, se han incorporado un total de 10 celadores, cuatro profesionales de administración y ocho vigilantes más de seguridad adicionales al número ya existente, como personal de refuerzo en cada una de estas áreas de máxima afluencia. Estas medidas de control de acceso y tránsito por los centros afectan tanto al área de consultas externas, como a los dos puntos de urgencias, situados en el Hospital Clínico y en el Valle del Guadalhorce; y también en las distintas áreas asistenciales de hospitalización. La contratación del personal de refuerzo se encuentra dentro de las medidas extraordinarias que la Consejería de Salud y Familias está llevando a cabo para mejorar las condiciones de accesibilidad y seguridad que exige debido a la pandemia.
Por su parte, el director gerente del hospital, José Antonio Ortega, ha explicado que «se trata de una primera medida dentro del plan de seguridad en el que el centro está trabajando para mejorar las condiciones de seguridad tanto de los pacientes y sus familias, como de los profesionales».
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