El centro de salud de Los Junquillos, en La Línea de la Concepción, vivió un episodio de gran preocupación el pasado jueves 20 de septiembre, cuando un usuario ingresó al recinto mostrando una actitud agresiva y portando un cuchillo de gran tamaño. El hombre, que exigía recibir medicación de manera inmediata, fue finalmente controlado por el vigilante de seguridad presente en el lugar.
Según testigos que presenciaron el incidente, el usuario, conocido por sus comportamientos conflictivos en visitas previas al centro, apareció en la tarde con una actitud violenta, amenazando al personal y exigiendo que se le proporcionara su medicación. Gracias a la rápida intervención del vigilante de seguridad, la situación no pasó a mayores: el vigilante logró desarmarlo y reducirlo antes de que pudiera causar algún daño. El cuchillo fue incautado y el hombre quedó a disposición de las autoridades.
Ante esta situación, los vigilantes de seguridad privada que prestan servicio en el centro de salud han manifestado su preocupación por la repetición de incidentes violentos. "Nos enfrentamos a situaciones con armas blancas con demasiada frecuencia, y los recursos que tenemos no son suficientes", explicó uno de los vigilantes del centro.
El colectivo de vigilantes solicita una mejora en las condiciones de seguridad, tanto en términos de personal como de equipamiento. Entre sus demandas destaca la necesidad urgente de chalecos antipunzantes, ya que consideran vital contar con protección adicional frente a los riesgos que enfrentar. "Estamos expuestos y vulnerables ante este tipo de situaciones. Algún día podría ocurrir algo más grave si no se toman medidas", añadió uno de los guardias.
El centro de salud de Los Junquillos, que permanece abierto las 24 horas y ofrece tanto atención primaria como servicios de urgencias, cuenta actualmente con un equipo de cinco vigilantes de seguridad, distribuidos en turnos. Sin embargo, el personal considera insuficiente esta dotación y pide un refuerzo en la plantilla para poder abordar adecuadamente los riesgos que enfrenta a diario.
Este episodio ha vuelto a poner de manifiesto la necesidad de incrementar las medidas de seguridad en los centros de atención sanitaria, donde tanto el personal como los pacientes pueden verse expuestos a situaciones de peligro creciente.
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