Un sindicato de representantes de los trabajadores del sector de la seguridad privada ya presentó ayer una denuncia por los vigilantes de la piscina de Oira
Después de la presentada ayer contra el Concello de Ourense por tener contratada a una empresa no especializada para las tareas de vigilancia en la piscina de Oira, el mismo sindicato -USO- ha anunciado este jueves una segunda denuncia. En esta ocasión, critican que el ayuntamiento tiene contratada a la misma compañía, Printes Security Advice S.L, para la vigilancia en la Casa do Concello.
Según repiten los denunciantes, la empresa no tiene autorización del Ministerio de Interior para llevar a cabo esta tarea y el personal que emplea no está habilitado para la misma. En el edificio de la Plaza Mayor, Printes ofertar labores de conserjería y control de accesos, acompañamientos, guías y consultoría en seguridad, según indica en su cartera de servicios.
Las denuncias fueron cursadas por la USO ante la Unidad Central de Seguridad Privada del Cuerpo Nacional de Policía, encargada de proponer sanciones administrativas, pero el sindicato no descarta "emprender paralelamente la vía judicial contra los responsables de empresa y organismo público".
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