TRAS LA OLEADA DE ROBOS, FUTBOLISTAS DEL PRIMER EQUIPO DEL VALENCIA CONTRATAN SEGURIDAD PRIVADA PARA VIGILAR SUS CASAS MIENTRAS ESTÉN CONCENTRADOS

La oleada de robos en casas de futbolistas continúa, aunque la mayoría de los asaltos fueron frustrados en la urbanización Torre en Conill, y varios jugadores del Valencia y el Villarreal han tomado ya buena nota para no convertirse en víctimas. Tras aumentar las medidas de seguridad en sus domicilios con cámaras de vídeo, circuitos cerrados de televisión y sistemas de alarma con detector perimetral, algunos futbolistas han contratado también en las últimas semanas los servicios de un vigilante privado para que proteja las casas mientras ellos están concentrados con su equipo o disputan partidos.
El refuerzo de la seguridad en sus propiedades es complementario a los operativos que realizan los agentes de la Guardia Civil y Policía Local de Bétera con el apoyo de los vigilantes de la urbanización, especialmente las noches en las que el Valencia o el Villarreal disputan algún partido. Las patrullas policiales aumentan los controles en los accesos a Torre en Conill e identifican a los ocupantes de vehículos que les infunden sospechas. Esta urbanización de Bétera dispone de un servicio privado de patrullas de vigilancia durante las 24 horas del día, lo que reduce el tiempo de respuesta policial. Los vigilantes y los agentes de la Guardia Civil tardan muy pocos minutos en atender un aviso de alarma.
Entre los futbolistas de Primera División afectados por estos asaltos en la Comunitat Valenciana se encuentran Gabriel Paulista, Ezequiel Garay, Ramiro Funes Mori, Geoffrey Kondogbia y Toko Ekambi, aunque los ladrones solo lograron robar en la casa del último futbolista, concretamente en la urbanización Torre Bellver en Oropesa, cuando sustrajeron el coche de alta gama que conduce el delantero camerunés del Villarreal

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