Cleptómanas famosas también fueron pilladas robando en una tienda

No es una cuestión de tener o no dinero. Es un enfermedad que se llama cleptomanía y afecta igual a gente normal de la calle como a personas famosas.

Un buen número de celebrities fueron pilladas en algún momento por las cámaras de seguridad de un establecimiento mientras estaban robando algún producto. Informa ExclusivaDigital.Com

Tras el escándalo del vídeo en el que se ve a la ya ex presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, vaciando su bolso a petición de un vigilante de seguridad de un centro comercial madrileño después de haber sido captada robando unas cremas anti-edad, nos vienen a la memoria casos de otras personas famosas del mundo del espectáculo que fueron descubiertas in fraganti llevándose algún artículo sin pasar por caja.

Tal es el caso de Winona Ryder fue detenida por la policía en Los Ángeles en diciembre de 2002 por robar ropa y accesorios valorados en 4.700 dólares de la tienda Saks Fifth Avenue. Las cámaras de seguridad de la exclusiva tienda de moda la delataron.

La candidata al Oscar por 'Mujercitas' y 'La edad de la inocencia' fue condenada a tres años de libertad condicional y el pago de 6.355 dólares por las prendas robadas, además de tener que hacer terapia para su trastorno cleptómano y dedicar 480 horas de trabajo comunitario.

En el 2011 la actriz Lindsay Lohan fue condenada a 4 meses de cárcel y a 480 horas de trabajos comunitarios después de llevarse sin pagar un collar de 2.500 dólares de una joyería de Venice, California.

En su defensa, Lohan argumentó que no se trataba de un robo, que simplemente "lo tomó prestado". Aunque las grabaciones de las cámaras de seguridad no dejaban lugar a dudas.

Antes de ser conocida, Megan Fox fue detenida por la tontería de intentar llevarse sin pagar una barra de labios (de 7 dólares) de Walmart. Confesó el hurto llorando a los guardias de seguridad. Como castigo, le prohibieron volver a pisar esas famosas tiendas.

Otra actriz, en este caso Amanda Bynes, fue detenida por miembros de de seguridad de los almacenes neoyorquinos Barneys cuando intentaba salir del establecimiento llevando puesto un sombrero que no había pagado. Cuando fue interrogada dijo que lo tomó para taparse de los paparazzi. La dejaron ir y no presentaron cargos en su contra.

Juliette Lewis, protagonista de 'Asesinos por Naturaleza' intentó llevarse puestos unos jeans sin pasar por caja previamente. Lo peor de todo es que, en vez de pedir perdón, montó un espectáculo.

a cantante Katy Perry confesó en una entrevista a la BBC que tenía la manía de llevarse las almohadas de los hoteles donde se hospedaba. "Robo almohadas de cada uno de los sitios en los que me quedo", reveló.

Menor fue el hurto de Britney Spears. Lo curioso, pese a que solo se trató de un encendedor, es que mostró orgullosa de haber robado delante de las cámaras de vigilancia del establecimiento. "He robado algo. Qué mala soy",dijo mirando hacia el vídeo que la grababa. Al parecer la Princesa del Pop no pudo resistirse a caer en la tentación.

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