El sector de seguridad privada refuerza el dialogo social en España como mecanismo útil ante la transformación

El observatorio de seguridad privada compuesto por APROSER, ASECOPS, UGT, CCOO y USO constituye mesas específicas para abordar con tiempo suficiente y desde el necesario dialogo social la transformación que fruto entre otros factores de la era tecnológica afectarán al sector en los próximos años.

UGT una vez entrado en vigor el convenio colectivo estatal de seguridad privada para los próximos cuatro años y que recoge un incremento del 16% durante su periodo de vigencia toma como uno de sus objetivos prioritarios reforzar el dialogo social tanto con asociaciones patronales como con todos aquellos ámbitos políticos e institucionales que de una u otra forma participan en decisiones que afectan al desarrollo y el empleo de la seguridad privada en nuestro país.

Formación Profesional como vía de acceso a la profesión en un futuro cercano donde abordar las distintas especialidades del sector, así como los perfiles tecnológicos de futuro Recuperar el contrato de relevo por jubilación anticipada, así como impulsar los coeficientes reductores como vía de rejuvecimiento de plantillas y salida digna de la profesión para las personas trabajadoras de avanzada edad.

Avanzar hacia un reglamento del siglo XXI donde exista un reconocimiento expreso de la complementariedad de la seguridad privada, así como una mayor protección individual y jurídica.

Modificar los criterios de contratación pública que siguen siendo una de las mayores lacras para el personal de seguridad privada debido a los bajos precios y a la proliferación de empresas que finalizan su actividad en el sector con concurso voluntarios dejando en exclusión a sus vigilantes de seguridad.

Análisis real de la situación del Transporte de Fondo ante el ataque al efectivo y nuevos nichos de mercado capaces de mantener y generar empleo para las personas trabajadoras dedicados a la mencionada actividad profesional.

Para UGT resulta imprescindible una necesaria anticipación al cambio ante los nuevos retos tecnológicos, así como un cambio de modelo de seguridad privada en España donde empresas, sindicatos y gobierno deben jugar un papel fundamental.